nail art
Manicura ‘tie-dye’ explicada para principiantes
¿Sabes cuando algo te gusta mucho y a la vez te produce bastante respeto? Pues eso es un poco lo que genera la manicura tie-dye; que al parecer tan elaborada la etiquetamos como inalcanzable ¡y no! ¿Nuestra misión de los próximos minutos? Quitarte esta percepción de la cabeza.
El efecto desteñido se ha colado en tu casa, en tu armario —reconoce que alguna parte de arriba ha caído—, en tu bolso y seguro que en más espacios de tu vida; eso sí, con las uñas todavía no te has atrevido. ¿Por qué? Pues porque piensas que te vas a hacer un “destrozo”. Vale, respetamos tus miedos, pero échale un ojo a este paso a paso made by @ajackdannie y quizás cambies de opinión. Vamos, es que estamos casi seguras de que vas a cambiar de opinión.
¿Prefieres tirar ya por tonos un poco más otoñales? Pues lo entendemos perfectamente y adelante pero, por lo menos, la técnica de la manicura tie-dye la tienes y solo habría que adaptar la paleta de color. Si es que cuando te decíamos que no era complicada, te lo decíamos por algo…
Cómo hacerte unas uñas ‘tie-dye’ en casa
Puede que ahora mismo mires la foto, mires tus manos y los veas como dos universos incompatibles, pero ya verás el giro que da el cuento en cuanto descubras este manual fácil y rápido. Si es que en el fondo somos capaces de todo…Paso 1: primeras capas
¿De qué? Pues de la base, obvio, y del esmalte de fondo que vayas a utilizar. Nosotras para esta ocasión te proponemos una capa de Here to stay, perfecta para suavizar las irregularidades de la uña igualando la superficie de una sola pasada, y otra del tono Blanc de essie. Por cierto, y muy importante, manos perfectamente limpias, hidratadas y uñas 100% preparadas (nos referimos a limado, cutículas, etc.) antes de empezar.Paso 2: más base
Una vez que el gesto anterior esté completamente seco, vuelve a reincidir con otra capa de la misma base; no es lo habitual —ni mucho menos— pero muy pronto vas a entender el porqué.Paso 3: líneas de color
Nada más terminar de aplicarte la segunda capa de base y sin esperar a que se seque, dibuja tres líneas de color paralelas y ligeramente separadas entre sí. Insistimos: sobre la base todavía húmeda para que los trazos queden un poco como flotando. Nuestra versión un poco más pastelosa: el rosa Lovie Dovie, el azul Bikini so teeny y el irresistible morado Lilacism que no puede ni llevarse ni gustarnos más.Paso 4: romper las líneas de color
De nuevo, volvemos a invocar a tu velocidad en esta manicura tie-dye y es que realmente la vas a necesitar. Con las tres líneas de color todavía húmedas —lo ideal sería que la base también lo estuviera— coge un pincel más fino y mójalo en una gotita del esmalte blanco para lanzar 3 líneas diagonales desde el lado izquierdo al derecho. Seguidamente y sin perder ni una pizca de este “ritmazo” que te estás marcando, moja el pincel en una mota del color azul y traza otras tres líneas diagonales en sentido opuesto y entremedias de las anteriores. Si ves que no te da tiempo, haz todo el proceso completo uña por uña porque si no va a ser complicado que no se te sequen.Paso 5: sellar con un ‘top coat’
Ya solo te quedan dos cosas: repasar los bordes con el quitaesmalte Good as gone (por si se hubieran quedado muchos “restos cromáticos” de lo anterior) y terminar con una capa de top coat para un resultado que ni tú misma te creerás. Con Gel setter obtendrás más intensidad de color —si cabe— y un acabado superbrillante.¿Prefieres tirar ya por tonos un poco más otoñales? Pues lo entendemos perfectamente y adelante pero, por lo menos, la técnica de la manicura tie-dye la tienes y solo habría que adaptar la paleta de color. Si es que cuando te decíamos que no era complicada, te lo decíamos por algo…